Mi Primer Día de Trabajo! Venía con sorpresa...

Después del mensaje que decía que por fin había quedado en un trabajo de tiempo completo en un cafécito muy top en las puertas de Surry Hills, llegue de cabeza a ver videos de youtube sobre como hacer café en la famosa máquina.  No iba a decepcionar a Jamie, no señor! Aprendí- en teoría al menos- la diferencia entre un flat white, un capucchino y un moccha. Repetí los pasos en mi mente, y aunque estaba cansada, seguí viendo videos hasta tarde, e insisto, aún cuando no me gusta el café, "¡qué importa!", pensé, estaba motivada y feliz, sabia que había escuchado bien a mi estomago. Era un lugar super bien ubicado, el horario era perfecto, cinco días a la semana...feliz! La paga era la mínima legal, pero con las horas suficientes, haría suficiente plata para poder ahorrar.

 (y así es como empieza la corriente de conciencia - vislumbrando futuros que no existen...-)

Comencé a hacer planes: las zapatillas que me compraré, los restaurantes que podré visitar, pero todo con moderación, ojo. Me podré inscribir en yoga quizás, y definitivamente tomaré el curso de Barista este fin de semana, para no dar más jugo con el café. No hay que tomar a la ligera la confianza que Jamie puso en mí...

Bueno, llegue y ¡manos a la obra! A limpiar, a atender, a ordenar... 

Llevaba unas dos horas en el lugar cuando llega la esposa de Steven, me saluda (no creí haberla visto antes), y me piropea la trenza que me había hecho, especial para la ocasión.

Pasados unos 10 minutos, me llama a su oficina ( la oficina de su esposo, en realidad). Con su sonrisa estirada y pinta de vieja sport, me dice que me pagará las horas que estuve trabajando, y que me puedo ir a la casa porque encontraron a una persona. 

Yo 

quede... 

PLOP. 

No entiendo nada. 

Le digo, en el inglés más champurreado que me ha salido hasta ahora, que entiendo que no sé preparar café, pero planeaba tomar el curso de barista ese mismo fin de semana, para no cometer más errores. La señora se siente incómoda y me dice que, si, si, que está super bien, porque Steven necesita alguien que haga de todo, pero que me vaya porque él me llamará durante la tarde para ofrecerme algo en la cocina. Yo - Pestañeo, pestañeo- aún no caigo. La señora me pasa la plata y me dice que me vaya, que me llamaran.

"¡TE LLAMAMOS!" -en Australiano-,  se llama eso.

Que ...

PENA. 

Como zombie, salí del café con mis 60 dólares en la mano (¿Fue mucho, fue poco? No podía pensar ni siquiera de dónde salió ese cálculo de plata). Estaba totalmente confundida, como robot al que le cae agua, me había echado a perder. Estaba como PC actualizando los componentes de Windows y me quede pegada en el 10%. Como cuando probé el Kimchi y lo odie, y después lo probé de nuevo y lo amé ( a lo que he bautizado como "shock de Kimchi" y se refiere a una confusión mental generalizada y que dura gran parte del día). No sabía qué sentir, no sabía qué pensar. Les juro que mientras caminaba a la estación del metro me preguntaba: "¿Qué te pasa? ¿te da pena? ¿te da rabia?". No podía identificar el sentimiento.

No entendí por qué me hicieron ir. No entendí por qué me hicieron irme. No entendí nada. Fue rarísimo. Eufemística y chilenamente hablando: que mala volá decirle a alguien "quedaste!" y despacharla dos horas después de haber empezado su primer día.

Mi mamá después me decía: "¡Pero, si ni te gusta el café!, ¿Por qué ibas a hacer el curso de barista?" Y es verdad: ¿Cómo saber si hago algo bien si una de las cosas que son parte de mi trabajo ni siquiera me interesa? Es ACSULDO, citando a mi sobrino que es muy sabio.

Conclusión: 

Todo esto me hizo pensar que el problema era Yo, obviamente:

Si no fuera porque Yo me interpongo en mi camino, las cosas saldrían bien. Yo y mis "faltas" obstaculizan la vía: no tener dos años de experiencia haciendo café, por ejemplo. Yo y mi cara seria - yo la llamo cara de concentración-, no meterle conversa a los clientes y preguntarles como les va en su vida, tratar de hacerme su amiga. Eso es Customer Service, sonreír hasta que duela - la mandíbula-. Esos defectos, esas cosas que "me faltan",son las que me hacen pasar por estas situaciones.

Pero, la verdad no es esa. La verdad es que tengo que ser más segura. Eso lo tengo claro. Creerme el cuento. No sé hacer café,  ¿SO WHAT?. No es como construir cohetes que van a la luna. Todas las personas que sirven café saben hacerlo, DEBE SER POSIBLE APRENDER porque son de mi misma especie. TODO ES POSIBLE EN LA VIDA, SI TE DAN LA OPORTUNIDAD.

Por otro lado, creo que never in my life cambiaré de personalidad para encajar en algún lugar. No va conmigo, no irá jamás, nunca pondré cara de que me caen todos bien, y les preguntaré sobre cómo va la vida de gente que no me interesa sólo porque mi pega se trata de atención al publico y tengo que sonreír y ser sociable todo el tiempo. SÓLO SONREIRÉ SI MIS MÚSCULOS INVOLUNTARIAMENTE LO HACEN, porque eso significa que realmente algo me hace feliz. Me rehuso a mentir para tener pega. En la experiencia sí, en el caracho, nica.  Y si mi cara de tímida no me hizo quedar, entonces no soy para eso.

Adiós para Siempre, Jamie. Me engañaste, fue una negociación del tipo: "combos iban, combos venían", y tu mujer ganó. Si, Cersei. Pero filo. Fue mega humillator. Pero, I Will Survive.

Al cabo que ni queria.....